Exigencia, triunfos y triunfalismo. Artículo de Carlos Bueno
Sin una mínima exigencia el toreo no tendría sentido, porque no todo tiene el mismo valor. El triunfalismo desbocado que tapa triunfos legítimos sólo favorece la falta de esfuerzo y de verdad en los actuantes, la ausencia de rigor y disparidad de criterios en las presidencias y, por tanto, la falta de seriedad, de respeto…