¡Ministro dimisión!

Qué pena tener a un Ministro de Cultura que clasifica ésta según sus gustos personales, y sobre todo, aceptando ser marioneta de sus jefes limitándose a cumplir con lo que le mandan para no crear polémica y así poder mantenerse en el sillón, aunque deje al descubierto su desconocimiento en Cultura y sus principios básicos.

Qué bien que despertaron

Qué alegría. Han despertado. Lo celebro como el que más. Quiero a los toros como a mi familia y les he dedicado atención cada uno de los días de toda mi vida. Como aficionado o como profesional del periodismo. Todos los días. Y desde mi más tierna infancia, desde la más tierna. De la mano…