Hijo y nieto de pintores, Lope Tablada nació en Segovia en 1948. Se formó con su padre, el pintor Lope Tablada de Diego. Artista precoz, expuso en 1957, cuando apenas tenía nueve años, junto a su padre, en el Centro Segoviano de Madrid.
Enrique Amat
Cuatro años después consiguió el primero de los numerosos premios que obtendría en su carrera, en el Certamen de Arte del Día de la Provincia de Segovia. Desde entonces, Lope Tablada ha desarrollado una intensa actividad pictórica y expositiva. Fiel a su estilo y a su temática, es autor de una obra intensa en colorido, donde el costumbrismo se mantiene vivo en escenas de género que van desde los temas taurinos a los de las antiguas labores del campo. Desde oficios artesanales ya desaparecidos, a calles de la Segovia de principios del siglo XX y en la actualidad.
El paisaje es otra de sus grandes pasiones, en el que siempre ha reflejado su preocupación por la luz. La suya es una pintura rápida y ágil, de pincelada corta y colores vibrantes.
En lo taurino ha pintado óleos simbolizando el toreo, el encierro o el retrato de toreros. Destaca su aportación como cartelista. En este sentido, plazas como las de Las Ventas, Palencia, Valladolid, Gijón o Segovia entre otras, han anunciado sus respectivas ferias taurinas con cartelería ilustrada con motivos pictóricos de Tablada.
También cultiva otros temas como monaguillos toreando, toros en el campo, espantapájaros toreros y apuntes de matadores. Una de sus últimas exposiciones fue la de treinta obras de diverso contenido, dimensionadas en variados conceptos y espacios que tuvo lugar en la Galería de Arte Zaca, sita en el segoviano Real Sitio de San Ildefonso. De ella formaban parte dos amplios lienzos que representaban a dos de los dos toreros más en auge del momento, Morante de la Puebla y José Tomás. También se encontraban pinceladas típicas de la fiesta de toros como El niño de las monjas I, II y III y En el patio jugando al toro.







