Necrológicas taurinas. Artículo de José R. Palomar
Escribía hace una semana mi admirada Carmen Rigalt: “No conozco a casi ningún periodista que disfrute dedicándose al manoseado género de las necrológicas. Aunque, haberlos haylos… La muerte de los demás nos coge, normalmente, con la persiana bajada. Pero la propia, siempre nos pilla por sorpresa, y desprevenidos…”.