Con El Jaro se va uno de los penúltimos supervivientes de las legendarias oportunidades, íntimamente unidas a las capeas castellanas de los pueblos madrileños y de la proximidad de la Alcarria, donde los encuentros con los toros broncos y duros en los irregulares e improvisados ruedos constituían verdaderos duelos de supervivencia.
Sustituyendo a Borja Jiménez, que no se ha recuperado de su lesión en la mano izquierda.
Luque deja de ser apoderado por Juan Bautista.
Una semana después de su alternativa.
Cuatro corridas del 11 de junio al 5 de septiembre.
No va a caber en un artículo porque Ponce fue un grande de los más grandes. Grande entre los grandes. Pero nadie es perfecto y, sin embargo, Ponce se asemejaba mucho, hasta su retirada imprevista y su cambio de mentalidad torera y de vida personal.