PALMAS
Al novillo Mocoso lidiado en cuarto lugar, del hierro de Flor de Jara, propiedad del matador de toros de Colmenar Viejo Carlos Aragón Cancela. Un ejemplar muy en el tipo santacolomeño, largo, cárdeno claro y engatillado de cuerna, que se dejó pegar en varas, y llegó al tercio final metiendo la cara por abajo, con fijeza, derechura y templanza, muy encastado y sobrado de raza.
PALMAS
Al espada madrileño Ángel Sánchez, quien abrió la puerta grande tras torear al natural con despaciosidad, mano baja, hondura y sometimiento, muy rota la cintura y rematando los muletazos por detrás de la cadera, con la virtud de llevar siempre embebido al novillo en los vuelos de la muleta, y firmando pases de pecho fueron de pitón a rabo.
PALMAS
A pesar de que los descansos se hacen eternos, es ilusionante ver durante los mismos el ruedo lleno de niños y gente joven acercándose a los toreros, haciéndose fotos y muchos de ellos toreando de salón con sus capotillos o pequeñas muletas. Eso es hacer afición.
PITOS
A lo largos que se hacen los festejos en esta feria. Los intervalos y tiempos muertos entre novillo y novillo son de muy largo metraje, y luego a cada astado le cuesta salir de chiqueros unos cinco minutos.
PITOS
A los pitones que lucieron los dos primeros novillos del festejo de ayer. Romos y escobillados hasta decir basta, impropios para saltar al ruedo en una feria de esta categoría.
PITOS
Ayer presidió el festejo otro miembro de la Comisión Taurina. Perfecto. Con todo, otrora, cada día presidía un concejal del ayuntamiento. Este año, las sensibilidades, las sostenibilidades, las políticas inclusivas y demás zarandajas parece que les frenan hacerlo. ¡Ay, Gregoria!